miércoles, 22 de octubre de 2008

Síndrome del Impostor

- Buenos días Doctor.
- Buenos días. ¿Cómo se encuentra?
- Pues estoy desquiciado. No se lo va a creer, pero mi esposa no es mi esposa.
- ¿Cómo?
- Cómo se lo explico Doctor. ¡Es tal la impotencia que siento! Pues al volver un dia a casa, me la encuentro allí, en el sofá. Estava cosiendo, como de costumbre hacía mi señora, pero cuando me fijé en ella, vi que no era ella. Se parece sí...no se lo niego. Se parece hasta en su manera de caminar...sus ojos...su ropa...su sonrisa...pero le digo que ¡no es ella! Doctor, haga algo por favor, no puedo seguir así.
- ¿Ella está aquí ahora?
- Se ha quedado fuera esperándome. Ha insistido en que vengamos al médico, y claro, he querido entrar solo para contarle este fraude. Desde luego, esta señora ha hecho un buen trabajo, se le parece tanto...pero le digo que es una impostora, ella no es mi mujer. ¿Usted sabría reconocer a su mujer verdad Doctor? Pues yo también.
- ¿Y cómo se lo explica, todo esto?
- Sólo se me ocurre que la hayan secuestrado y le hayan hecho un clon, sinó, ¡¿qué exlicación va a tener!?
- Claro...

martes, 14 de octubre de 2008

Chocohólica

Mmmm....voy a ver en la cocina.
Abro el armario nº 1. Busco. Aparto el café, los cereales, el pan bimbo...no, no está aquí. Miro por detrás.
- ¡Si estaba aquí...!- cierro el armario.
Abro el armario nº 2. Hay latas de conserva, leche y otros productos que no me interesan, aún así, los aparto para mirar a derecha e izquierda. Puede que lo haya puesto en la nevera. A simple vista no. Miro arriba, donde lo pongo en verano. No.
Abro el armario nº 1. Vuelvo a mirar. Saco varios paquetes (frutos secos, el pan bimbo de nuevo, el café). Definitavamente no está. Empiezo a mirar los armarios y a rascarme el pelo.
Miro el reloj. Son las 00.04 de la noche.
Suspiro.
Voy al comedor a por un cigarrillo. De paso doy una ojeada por la mesa y el mueble. Sólo libros, tabaco, una planta y varias velas. ¿Dónde puse el chocolate? Me entran unos cosquilleos por el estómago y ganas de llorar.
Miro por encima por todas las habitaciones. Vuelvo a la cocina. Abro el armario nº 1 pero sigue sin estar ahí.
Asumiendo la realidad, me pongo unas botas, una chaqueta y cojo 3 € de mi caja. De camino al "paki" de la esquina, con otro cigarrillo en la mano, me pregunto : ¿Seré adicta al chocolate?

viernes, 10 de octubre de 2008

Los 11 de Lisa

Lisa...
Qué ojos tienes, más dulces. La boquita pequeña y los cabellos revueltos, morenos, rizados. Siempre en falda corta o pantalones anchos y caídos. ¿Cómo sabes lo que me gusta? Ahora ya hace 3 años que estamos juntos y estoy tan enamorado de ti como al principio.
- Ahora princesa, nadie nos oye. Eso, eso, déjame verte la pierna. No te hagas la remolona, sé que te gusta.
Dios, me pongo a 100. Sólo tocarte el muslo. Ahora un poco más arriba.
- No pasa nada, tócame, mira cómo la tengo. Sólo tú me pones así...ahora arriba, ahora abajo. Juega con ella.
Y qué placer.
- Buenas noches pequeña, recuerda que es nuestro secreto. Mañana te daré tu regalo en tu 11 aniversario. Tu tío te quiere, no lo olvides princesa.