jueves, 12 de junio de 2008

Somatomórficamente

La luz del sol me molesta, me pongo las gafas de sol. Llevo un pañuelo en la cabeza y muchas tiritas en la mejilla. Todo por ella. La odio. Al final me he decidido a ir al médico, por mucha vergüenza que me de. Llevo 7 meses sin salir de mi casa. Ayer tuve un sueño y me he decidido a salir. ¿Y ése qué mira? Ai madre mía, que el corazón se me acelera, ¡se me está moviendo! ¡Tiene vida propia! Cada vez se hace más grande, ¡ya no sé qué hacer! Bueno, ahora amiguita te van a rajar. Y te me van a quitar de la mejilla. Ya puedes tener los pelos que quieras y ponerte lo negra que quieras que no te soporto más. Hace 2 meses casi me muero por tu culpa. Me corté las venas en la bañera para no verte más. Mi hermana me salvó. Me quería ingresar pero la eché de mi casa. Cuando ya no estés iré a verla. Me has hecho la vida imposible, y ahora vas a desaparecer.
“Dr Pantagera, Cirujano”, aquí es. Adiós a la amargura.
Adiós, maldita peca.

1 comentario:

tania dijo...

obsesiva? que fuerte cuando la mente se raya de lo que somos capaces,no existe nada mas que nuestro objetivo y como hacerlo desaparecer ,da miedo ; me gusta mucho como cuentas las cosas se hacen tan cercanas... y tan comprensibles un besito de tu mami ,ja,ja,ja, estoy en el punto de ebullición ( no se que saldrá