lunes, 25 de agosto de 2008

Síndrome Post-Vacacional

Ya lo tengo todo preparado. Voy a entrar a la oficina, Lunes 1 de septiembre de 2008. Voy a entrar, es el primer día de trabajo después de las vacaciones. Ya no quiero trabajar más, no quiero verles la cara nunca más a éstos imbéciles, gente que no tiene sangre en las venas, sumisos de la sociedad, o a aquellos otros que se creen reyes porque tienen un despacho desclorido.
- Hola, buenos días. Sí, todo muy bien, ¿y tú? Sí que cortas....

Odio mi vida, odio este edificio, odio esta gente. Ya estoy en mi sitio de trabajo. Qué mesa tan horrible, adiós silla incómoda. Ha llegado el momento. Voy a sacar mi arma. Sólo tengo que apretar el gatillo ante todo aquél que vea. Me levanto, y grito:

- Morid todooooooooooossssssssssssss!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Ahora que la mayoría yacen en el suelo, me tengo que disparar. Cuánta sangre hay. Hay alguien llorando. No lo he podido evitar. Sí, está en mi boca, ahora sólo apretar.

3 comentarios:

Karolina dijo...

Una vez más, escribes una fantasía común en muchos "normales".
Gracias por darle forma y hacernos sentir menos solos.

Hard attaaaaaaaack!!!

Anónimo dijo...

Esto me ha llegao!!!
Fins a la meitat es exactament la sensacio que he tingut en tornar de vacances.

Crec que ha arribat el moment de pirar-me d'aqui abans no mati a algú.

Hector

Anónimo dijo...

Somos como globos ,cualquier soplo de aire ,segun la dirección que lleve nos sube,nos baja,somos cerebro ,el manda no hay control alguno, estamos bajo su control.